Por medio de un cuentista la historia se entreteje con mucho humor. Mariposita en tiempo de casorio, invoca a todos sus pretendientes para saber quien le ama de verdad o no, mediante la prueba de enfrentar a los condenados malignos del pueblo, de la cual todos los aspirantes desisten, solo la flor de Airampito, el muchacho más humilde del pueblo, acepta la prueba por el verdadero amor de Mariposita y con los consejos de un anciano y la ayuda de la comunidad, él logra vencer a los condenados de la sociedad y al fin se realiza el matrimonio “La unión de la alegría de Mariposita y la fuerza de Airampito”.
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